-¿Me amas? - pregunta él a la hora de acostarse. Como todas las noches desde que están juntos.
- Sí - contesta ella, escueta pero definitiva.
Qué será de él la noche que ella dude, o simplemente diga no sé...
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4 comentarios:
No se...
mirá que hay lugares para comentar en la blogósfera y a mi me viene a llamar la atención justo este post :-D
no se... es terrible el no saber ... quizá peor que el escuchado no se...
no se, digo
A mi personalmente, me atormenta la duda...
... a veces, casi siempre quizá, a mi también...la del otro y la propia
me hubiera gustado tener un´toque mayor de oriente al amar. esto de juntar amor con sufrimiento de bien occidental y cristiano
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